Además de la terapia manual y la educación postural, el ejercicio terapéutico, pautado por fisioterapeutas profesionales, proporciona importantes beneficios físicos y psicológicos a estos pacientes, ayudándoles a hacer frente al dolor generalizado, al cansancio, a los problemas del sueño y a las alteraciones psicológicas asociadas a esta enfermedad.