La Fundación del grupo sanitario Ribera destina los fondos recaudados en su campaña de donaciones a la reconstrucción de centros de rehabilitación y fisioterapia en los municipios afectados por la riada de Valencia, en colaboración con el Ilustre Colegio de Fisioterapeutas de la Comunidad Valenciana. Los primeros fondos recaudados se han donado a 23 clínicas gracias al acuerdo firmado por la presidenta de la Fundación, Elisa Tarazona, y por el decano del Colegio, Josep Benítez.

La Fundación Ribera Salud ha destinado los fondos recaudados en su campaña de donaciones para la recuperación de centros sanitarios de rehabilitación y fisioterapia en los municipios afectados por la riada de Valencia. Esta campaña de recaudación de fondos puesta en marcha hace tres meses, tiene el objetivo de la reconstrucción de espacios sociosanitarios afectados por esta tragedia, para que puedan abrir y prestar servicio lo antes posible a los ciudadanos.
Los primeros fondos recaudados se han donado a 23 centros rehabilitación y clínicas de fisioterapia de las localidades más afectadas, gracias al acuerdo alcanzado con el Colegio de Fisioterapeutas de la Comunidad Valenciana, firmado ayer en el hospital Ribera IMSKE, por la consejera delegada de Ribera y presidenta de la Fundación Ribera Salud, Elisa Tarazona, y por el decano del Colegio de Fisioterapeutas, Josep Benítez. Ambas entidades se han centrado en la ayuda de clínicas y profesionales colegiados, que han avalado sus necesidades para cumplir con el objetivo de poder volver a abrir sus centros lo antes posible, para poder atender a los ciudadanos de las zonas afectadas.
La solidaridad con los afectados se mantendrá en los próximos meses, tanto a través de la recogida de donaciones por la Fundación como con otro tipo de acciones para seguir ayudando a los afectados y contribuir a la reconstrucción del tejido sanitario de proximidad.
Plan de ayudas del grupo Ribera para los afectados
Además de la campaña de la Fundación Ribera Salud, el grupo sanitario se volcó desde el primer momento con los afectados por la riada. En una primera fase, se recogieron productos de primera necesidad y se organizaron grupos de voluntarios para ayudar en las zonas afectadas. La Dirección de Personas facilitó permisos y teletrabajo, y días de permisos retribuidos para tareas de voluntariado. Por otro lado, el hospital Ribera IMSKE, especializado en el diagnóstico y tratamiento de patologías del aparato locomotor, ha ofrecido sus instalaciones y material a fisioterapeutas de las zonas afectadas, mientras recuperan sus clínicas o sus empleos, para que puedan seguir tratando a sus pacientes.
ICOFCV, al lado de sus colegiados
El Colegio de Fisioterapeutas de la Comunidad Valenciana por su parte, también estuvo desde el primer momento al lado de sus colegiados destinando 30.000 euros de sus fondos propios. Además, consciente del grave impacto que las inundaciones causaron en el colectivo, el Colegio convirtió su Jornada Internacional de Fisioterapia en una oportunidad solidaria, destinando el 50% de lo recaudado en las inscripciones a los damnificados, y abrió una Cuenta Solidaria, que sigue activa, para canalizar donaciones y continuar brindando apoyo a quienes más lo necesitan. A estas acciones se ha sumado la organización de un Congreso Benéfico Online de Fisioterapia, cuya recaudación íntegra se está destinando a los profesionales perjudicados por la catástrofe.
El compromiso del ICOFCV también se materializó en la recogida de donaciones de material, que fueron distribuidas directamente entre los colegiados afectados. Paralelamente, se firmaron acuerdos con empresas del sector para asegurar condiciones especiales y descuentos exclusivos para los miembros del Colegio, ayudando así a acelerar la recuperación de sus actividades profesionales.
Más allá del apoyo a sus colegiados, la solidaridad del Colegio alcanzó también a los pacientes de las zonas más afectadas. A través de la iniciativa SOS Fisioterapia ICOFCV, con la colaboración de fisioterapeutas voluntarios, se ofreció un servicio gratuito tanto en carpas como a domicilio que permitió prestar atención fisioterapéutica a más de un centenar de vecinos que no podía desplazarse o no podían permitirse acudir a un centro por las circunstancias.
El esfuerzo del ICOFCV se ha visto reforzado por las donaciones de otras entidades y colegios profesionales de fisioterapeutas de toda España. Gracias a estas contribuciones, ya se han hecho efectivas dos fases de ayudas económicas para facilitar la reactivación de la actividad profesional de los fisioterapeutas más afectados, distribuyendo más de 171.000 euros entre los colegiados damnificados.