Con motivo de esta celebración, el Colegio de Fisioterapeutas de la Comunidad Valenciana ha participado en el especial del periódico Las Provincias para poner en valor la figura del fisioterapeuta en las filas valencianistas. Asimismo, el Colegio ha aprovechado para felicitar al club por sus 100 años de historia.
El Valencia CF celebra este 2019 su centenario. La fecha no podía ser más valenciana: el pasado 18 de marzo, en plenas fallas. Con motivo de esta celebración, el Colegio de Fisioterapeutas de la Comunidad Valenciana pone en valor la figura del fisioterapeuta en las filas valencianistas.
En las últimas décadas de sus 100 años de historia, el Valencia CF ha contado en su estructura con una figura que ha ido consolidándose hasta convertirse en una pieza imprescindible para el equipo: el fisioterapeuta. Años atrás, cuando un jugador se lesionaba se escuchaba a menudo en radio y en televisión, o se podía leer en prensa, que “el masajista” había saltado al terreno de juego. Hoy, esa figura está totalmente profesionalizada y, tanto los medios de comunicación como la sociedad saben que el profesional que asiste al jugador en el campo ante una lesión son el médico y el fisioterapeuta, profesional sanitario de primer orden
La inclusión del fisioterapeuta en el equipo de fútbol va ligada al creciente impacto de este deporte en la sociedad actual y al salto cualitativo en las exigencias del rendimiento del deportista. Esto ha generado una importante demanda de personal especializado para exprimir al máximo las cualidades físicas del deportista, reducir el riesgo de lesión y optimizar el proceso de recuperación. De hecho, desde hace años, todos los grandes clubes cuentan con fisioterapeutas en su equipo multidisciplinar (junto a médico, preparador físico, psicólogo y nutricionista).
En la actualidad, el primer equipo cuenta con 5 fisioterapeutas –en el club en total hay 14-, entre ellos, los colegiados José Luis Estellés y Pascual Castell, ambos con una dilatada experiencia en equipos deportivos que les ha llevado hasta su actual club, el Valencia CF (anteriormente coincidieron también en el Valencia Fútbol Sala y en el Villarreal CF).
Su trabajo es clave para la salud de los jugadores, para que puedan entrenar y competir en las mejores condiciones. “El día a día es lo que más nos gusta. En la fisioterapia deportiva de élite convives a diario con el deportista. Hay un vínculo antes de entrenar y un feedback después del entrenamiento; conocemos cómo está cada jugador, lo que nos permite hacer un trabajo individualizado preventivo”, indica Pascual Castell.
Dentro del equipo multidisciplinar, el fisioterapeuta participa en el diseño y la aplicación tanto de las estrategias terapéuticas preventivas como de las estrategias de recuperación de las lesiones a nivel individual y colectivo. Además, obviamente, de asistir como profesional sanitario al deportista en el campo durante del desarrollo de los partidos. Un trabajo exigente por el nivel del equipo y por el incremento de competiciones en las que se participa.
“Hoy se juega en más competiciones y esto exige competir cada tres días. Para ellos es una mayor intensidad porque acumulan más minutos y hay que recuperarles antes. Por ello, intentamos evitar lesiones teniendo en cuenta las localizaciones más frecuentes, la epidemiología de años anteriores y la historia de cada jugador en concreto. Hacemos pruebas y test y en base a los resultados establecemos una serie de ejercicios en camilla y/o en gimnasio para poder prevenir futuras lesiones”, señala José Luis Estellés.
En cuanto a las lesiones más frecuentes en el fútbol, sin duda, son las musculares, tanto contusiones, calambres, contracturas, distensiones o roturas (isquiosurales, gemelos, cuádriceps…), esguinces de rodilla o en la zona del tobillo, fractura en la tibia y peroné… aunque según Pascual Castell las que más temen son “las lesiones de rodillas o las de tipo biomecánico como la pubalgia, que son más traumáticas”.
La exigencia se traslada al profesional y a su formación. Al conocimiento y aplicación de las técnicas más tradicionales como la masoterapia suman el uso de las técnicas más novedosas como la fisioterapia invasiva. “Esta solemos utilizarla mucho en la primera fase de la lesión para acelerar el proceso de curación biológica”, aclara José Luis Estellés.
Ambos reconocen que a veces es complicado evadirse de los resultados –más en su caso que son declarados valencianistas- pero intentan crear una barrera y dejar los sentimientos aparte cuando entran en la sala de tratamiento.
Más allá del trabajo, la puesta en valor de la figura del fisioterapeuta en los equipos de élite ha supuesto un mayor reconocimiento de la profesión ante la sociedad. “El fútbol ha ayudado a popularizar la figura del fisioterapeuta como profesional sanitario. Este deporte de masas ha hecho que el ciudadano conozca un ámbito destacado de nuestra profesión, la fisioterapia deportiva y todo lo que podemos hacer por la salud de los deportistas. Y lo mejor es que ha abierto el campo de actuación ya no sólo a grandes clubs como el Valencia sino a clubs pequeños, de otras categorías inferiores, en los que el fisioterapeuta también tiene un papel importante”, subraya el decano del Colegio de Fisioterapeutas de la Comunidad Valenciana, José Casaña.
Hoy el fútbol requiere de la fisioterapia porque esta es salud para sus jugadores. Nadie duda de ello. Con este ‘lazo’ que los une, el Colegio de Fisioterapeutas felicita al club en su conjunto por sus 100 años de historia.
Puedes leer el reportaje publicado en el especial del periódico aquí: Las Provincias.