Que el estrés no te pase factura

El frío y el calor como terapias fisioterapéuticas “antiestrés”

¿Tienes fatiga crónica?, ¿dolor de espalda, cuello y cabeza?... es momento de hacer un alto y buscar la ayuda de un fisioterapeuta.

 

Sentirse de esta manera indica que hay una situación de estrés que puede aumentar el riesgo de padecer enfermedades cardiacas, neurológicas o digestivas, motivados por tensiones laborales, familiares o personales que pueden aliviarse con diferentes técnicas de Fisioterapia.

 

El frío y el calor como terapias  “antiestrés”

 

La Termoterapia es una técnica que usa el calor con fines terapéuticos que para reducir el estrés que se acumula en la columna lumbar, dorsal o cervical. La aplicación de esta técnica fisioterapéutica facilita la relajación muscular, la eliminación de sustancias de desecho y mejora el metabolismo, entre otras.

 

Por otro lado, la aplicación de frío, técnica conocida como Crioterapia, es un tratamiento para el dolor agudo, y la inflamación en etapas agudas dado que ayuda a producir analgesia.

 

Además del frío y el calor, la Electroterapia, el Masaje Terapéutico, el ejercicio o técnicas posturales son válidas para que el estrés  diario no pase factura.