17 mayo. Día Mundial de la Hipertensión Arterial, “la Fisioterapia como aliada" (Art. Mª José Segrera y Francisco J. Ferrer)

 

 

Los colegiados Mª José Segrera y Francisco Ferrer Sargues explican los factores de riesgo de la HTA y cómo ayuda la Fisioterapia a estos pacientes, a los que además de controles recomiendan dieta sana, no fumar y ejercicio físico.

En el Día Mundial de la Hipertensión Arterial, hoy  17 de mayo, el Colegio de Fisioterapeutas de la Comunidad Valenciana recuerda que la Fisioterapia es una "aliada" para ayudar a combatir esta enfermedad "silenciosa". Actualmente, esta enfermedad es la causante de la muerte de más de 9 millones de personas al año, estando presente en el 80% de muertes por riesgo cardiovascular. La prevalencia de la hipertensión arterial (HTA) en la sociedad española es de aproximadamente un 35%, llegando al 68% en los mayores de 60 años.

En el artículo sobre HTA, nuestro colegiados Mª José Segrera y Francisco José Ferrer Sargues, hacen un repaso sobre los umbrales de hipertensión, las fases, los riegos y las causas de muerte más frecuentes en hipertensos, que son: enfermedades cardiovasculares (50%); accidentes cerebrovasculares (35%) e insuficiencias renales (15%).

Segrera y Ferrer subrayan que aunque la lógica sería realizar una prevención primaria, la característica de enfermedad silente "hace que los fisioterapeutas intervengamos con este tipo pacientes en una prevención secundaria. En mayor porcentaje suele ser después de haber sufrido un accidente cerebro vascular o un evento cardíaco".

En el artículo indican que en la mayoría de hospitales, el papel del fisioterapeuta tras un síndrome coronario agudo (SCA) se inicia desde la Unidad de críticos, desde las 24 horas del cateterismo y con el paciente hemodinámicamente estable. "Es entonces donde se debe dar la información adecuada sobre los posibles factores de riesgo modificables y no modificables, reflexionando sobre aquellos que han podido influir sobre el desarrollo de su enfermedad y concienciando de la importancia de cambiar a estilos de vida más saludables. Si el paciente fuera hipertenso insistiríamos en la importancia de la dieta baja en sodio y de realizar ejercicio físico de forma progresiva y adecuada a la frecuencia cardíaca de entrenamiento, consensuada según sus pruebas funcionales y estratificación de riesgo".

Los dos fisioterapeutas defienden que es vital informarle "de un correcto protocolo individualizado de readaptación, con la enseñanza de identificación de signos y síntomas de alarma, al igual de la importancia de un precalentamiento suave previo y realizar ejercicio de forma progresiva con sus estiramientos posteriores a este y haciendo hincapié en no parar ni acelerar de forma brusca, puesto que esta podría modificar perjudicialmente en un inicio a su tensión arterial".

Para leer el artículo completo, descargar el pdf adjunto.